“Se invitará a las parroquias que se encuentren en una situación cultural especial a incorporar las expresiones especiales de lenguaje, música y expresión cultural dentro de la liturgia de acuerdo a las normas litúrgicas… (Plan Pastoral, Sacramentos y Adoración; Meta 1,Objectivo 16).
Históricamente la presencia hispana en nuestro país es distinta de la de los europeos. Los hispanos han mantenido sus propias espiritualidades vibrantes a través de su religión popular, devociones, creencias, celebraciones y tradiciones que los constituyen como comunidad.
El futuro de la iglesia de los Estados Unidos dependerá en gran porcentaje de la forma como lleguemos a esta comunidad de habla hispana, como demos la bienvenida y cómo los aceptemos, como nos respetemos y cómo nos enriquezcamos mutuamente unos a otros con nuestras propias culturas.
A continuación nombramos algunas de sus principales tradiciones:
1-Celebraciones de Quinceañeras:
La celebración de Quinceañeras ha sido aprobada oficialmente en la Arquidiócesis de Santa Fe y se suplica a las parroquias aprovechar esta tradición para recibir a las familias, para evangelizarlas y para hacerlas parte de la parroquia.
2- Presentación al Templo:
Esta es una tradición mexicana muy popular relacionada con la Presentación de Jesús al Templo. Tradicionalmente es celebrada durante los primeros cuarenta días después del nacimiento del bebé, o como una bendición al cumplir tres años. Esta, puede ser una buena oportunidad para catequizar y evangelizar. Se puede celebrar durante la misa, después de la homilía, o de la comunión, aún fuera de la misa siguiendo el ritual incluido en esta página web.
3- Otras celebraciones entre los hispanos:
Los hispanos tienen muchas otras tradiciones, tales como las Posadas, bendiciones de casas, bendiciones de animales, el Día de los Muertos, Novenas y muchas otras devociones a María y a los santos. Lejos de eliminar estas tradiciones, en buena evangelización debemos de transformarlas a la luz del evangelio y aprovecharlas para recibir a las familias y hacerlas parte de nuestra comunidad parroquial.